Las unidades de hospitalización a domicilio (UHD) prestan servicios a las personas y sus familias en el contexto domiciliario, es por ello que, unido a las características patológicas de los pacientes domiciliarios y el acumulo de los problemas de índole socio-sanitaria, su duración en el tiempo y los frecuentes cambios de estado, así como la problemática propia de los cuidadores, requiere de un conjunto amplio de servicios prestados simultanea o secuencialmente por múltiples agentes formales. Esta multiplicidad de patologías, de servicios a prestar, de agentes y su doble dependencia, genera un contexto en el que proporcionar una atención domiciliaria de calidad es una tarea compleja. Frente a las tendencias del entorno que muestran un incremento permanente de las necesidades de atención en el domicilio y la naturaleza compleja de las mismas, dos cuestiones parecen claras: 1. Que la atención en el domicilio es llamada a convertirse en uno de los eslabones más importantes del sistema sanitario. 2. Se constata que la atención en el contexto del domicilio no lo puede llevar a cabo una sola disciplina, un agente único o un único sector. Por lo tanto los profesionales y agentes son cada vez más interdependientes para poder prestar la diversidad de servicios requeridos. Por tanto toda la actividad llevada a cabo en el domicilio deberá ser multiservicios, interdisciplinar, compartida, coordinada e intersectorial. Desde esta perspectiva de trabajo en equipo, habilidad para valorar los procesos fisiopatológicos, familiares y llevar a cabo cuidados de calidad con la aplicación de la metodología enfermera