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La asignatura tiene por objeto el análisis de las diferentes etapas o fases en las que se estructura el proceso penal, comenzando por la fase de investigación o instrucción sumarial, que se estudia con particular profundidad, no sin antes hacer repaso de las funciones que corresponden a la policía judicial especialmente en este periodo, y las diferentes formas de dar inicio a un proceso penal. El estudio, en este primer momento, se centra en las diversas diligencias de investigación a practicar y la limitación de los derechos fundamentales de la persona en la que, por lo general, éstas se resuelven. Se examina, además, el sistema de medidas cautelares arbitrado por el legislador español, que pueden ser acordadas desde el inicio y a lo largo del proceso hasta su finalización. En un segundo momento, el estudio viene centrado en la prueba, como instrumento procesal básico, a partir de los principios rectores de esa actividad y las garantías que han de rodear su desarrollo, todo ello precedido del análisis de la apertura del juicio oral, y de los diferentes escritos en los que viene fijada la acusación. En este estadio, resultará fundamental conocer el alcance del derecho a la presunción de inocencia, como regla de juicio y valoración, y la formación de la sentencia. El último bloque de materias viene constituido por el estudio de los distintos tipos de procesos arbitrados en el Ordenamiento procesal español.
Conocidos, a partir de la asignatura de Introducción al Proceso Penal, las nociones básicas del Derecho Procesal, y en particular, la figura del imputado, el derecho de defensa, el derecho a la presunción de inocencia, y la forma en que pueden limitarse derechos fundamentales de la persona a resultas de la investigación penal, cuando el curso finalice, el alumno deberá saber:
Al finalizar el curso, el alumnado deberá ser capaz de resolver cuestiones o supuestos, hipotéticos o reales, que se planteen en relación con los diferentes temas que integran el programa, y resolver o integrar vacíos legislativos con el criterio jurisprudencial. Así, posible actividad prácticas a realizar puede ser la formulación de diferentes escritos, los de acusación y defensa, los dirigidos a interesar la práctica de diligencias de prueba o para luchar frente a su denegación, resolver una cuestión acerca del carácter lícito o ilícito de la prueba, el planteamiento de un proceso de habeas corpus, etc.
Cursadas estas enseñanzas, el alumno deberá ser capaz de realizar análisis críticos de textos jurídicos y teorías jurídicas, de presentarlos adecuadamente ante un auditorio y de discutir y argumentar correctamente sus opiniones.